viernes, 14 de septiembre de 2012

Grafiti en Alicante calle Tridente esquina a Avenida de la Goleta


Un sorprendente y llamativo grafiti predominantemente geométrico. De composición  centrada y simétrica y cierto barroquismo. Se encuentra en un muro de cerramiento de uno de esos locales comerciales que llevan años esperando que alguien los ponga en uso.

 Mientras tanto, es un regalo para la vista, un placer, comtemplar lo que la paciencia y el trabajo de un artista ,no cotizado comercialmente, quiere mostrar al viandante.
La simbología del pavo real es larga, ya que su majestuosidad llamó la atención del hombre ya en épocas pasadas. Aunque se le asocie con el concepto de vanidad, el pavo real es, en casi todas las culturas, un símbolo solar relacionado con la belleza, la gloria, la inmortalidad y la sabiduría. Es originario de la India y fue Alejandro Magno quien lo llevó a Occidente

El pavo real es el ave nacional de India. En el hinduismo, el pavo real sirve de montura a Skanda, el dios de la guerra. 

En la antigua Grecia, fue el ave simbólica de Hera, la diosa griega más importante del Olimpo, esposa legítima de Zeus y diosa de las mujeres y el matrimonio. Según cuentan, Hera encargó a Argos, un gigante con mil ojos, que vigilase a una de las amantes de su infiel esposo pero fue asesinado por Hermes. Cuando la diosa se enteró de la muerte de Argos, tomó sus cien ojos y los puso en la cola del pavo real, dándole el aspecto que tiene actualmente.



En Roma, las princesas y emperatrices tomaron el pavo real como su símbolo personal. De este modo, el pavo real pasó al simbolismo cristiano fuertemente relacionado con la Gran Diosa por lo que no es difícil comprender su conexión positiva con la Virgen María y las delicias del Paraíso. En la religión cristiana, es considerado símbolo de resurrección de Cristo porque en primavera, tiempo de Pascua, el ave cambia totalmente de plumaje. No se le suele representar con su cola desplegada ya que es una imagen que sugiere vanidad, un concepto contrario a la caridad y la humildad del mensaje del cristianismo. Se pueden ver mosaicos del siglo IV con esta figura en la iglesia de Santa Constancia, en Roma, así como en algunas catacumbas cristianas. En general, las representaciones de pavos reales muestran al ave bebiendo de un cáliz o de una fuente (Fuente de la Vida) simbolizando un renacimiento espiritual, asociado con el bautismo y con la eternidad del alma.